Un Tratado para Proteger el Patrimonio Genético del Olivo

El Consejo Oleícola Internacional (COI), la organización intergubernamental que coordina la red internacional de bancos de germoplasma del olivo; el gobierno español, sede de una de las colecciones internacionales más significativas de Olea europeae; y la Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura (FAO) se han unido para firmar un histórico acuerdo de colaboración para consolidar la colección de España bajo el Tratado Internacional de la FAO sobre Recursos Fitogenéticos para la Alimentación y la Agricultura (TIRFAA).

 

El banco de variedades de olivo de Córdoba se incorpora al tratado internacional de la FAO

Este acuerdo supone un paso más hacia la conservación de los recursos genéticos del olivo. Estos recursos juegan un papel fundamental no sólo en la conservación de la biodiversidad y como base de la actividad socioeconómica agroalimentaria, sino también para afrontar los retos que plantea el cambio climático, como las variedades resistentes a plagas y enfermedades, la sequía y otros desafíos ambientales críticos.

En este sentido, el gobierno de España, primer productor mundial de aceite de oliva y sede de una vasta colección internacional de Olea europea en Córdoba, es el primer país en firmar un acuerdo con el ITTPGRFA y el COI para conservar y promover la investigación sobre el sector olivarero.

De esta forma, España incorpora a la red internacional de bancos de germoplasma, reconocidos por el tratado, una colección de más de 1.200 variedades de olivo procedente de 29 países que contribuirá a impulsar nuevos proyectos de investigación e innovación.

 

Fortaleciendo la colaboración internacional para un futuro sostenible

Uno de los principales objetivos del Consejo Oleícola Internacional es la identificación, conservación y utilización de los recursos genéticos del olivo. El COI coordina bancos de germoplasma de olivo en casi la totalidad de sus veinte estados miembros, así como siete colecciones internacionales, una de las cuales está en España.

El COI y la Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura (FAO) firmaron un Memorando de Entendimiento en 2021 para desarrollar, promover y fortalecer acciones conjuntas que impulsen un sector oleícola más eficiente y sostenible. La consolidación de la red internacional de bancos de genes del olivo en el marco del ITTPGRFA es un paso estratégico en este sentido, por lo que el COI anima activamente a sus países miembros a firmar acuerdos como este con el fin de consolidar una red internacional de bancos de genes del olivo bajo los auspicios del TIRFAA.

 

Declaraciones y compromisos en el marco del acuerdo

Jaime Lillo, director ejecutivo del COI, celebró el acuerdo tripartito recordando que «parte de la solución al cambio climático está en los recursos fitogenéticos del olivo, que constituyen un verdadero tesoro para nuestro patrimonio común».

Luis Planas, Ministro español de Agricultura, Pesca y Alimentación, destacó la importancia de la diversidad fitogenética del Banco Mundial de Germen de Olivo. Según Planas, “España es responsable de que el olivo siga siendo uno de los cultivos esenciales para garantizar la seguridad alimentaria y eje vertebrador de grandes espacios rurales y fuente de riqueza para las comunidades oleícolas”.

El Secretario del ITPGRFA, Kent Nnadozie, destacó que “este acuerdo histórico, que integra las colecciones de olivos de Córdoba en el sistema multilateral del Tratado sobre los
Recursos Fitogenéticos , es un hito importante para la agricultura y la biodiversidad del mundo. Destaca el compromiso global de preservar la diversidad genética de las plantas oleaginosas y promover el acceso equitativo a estos recursos vitales. Junto con el COI, estamos garantizando que estos preciosos recursos se conserven y sean accesibles para el beneficio de todos, promoviendo la agricultura sostenible y la seguridad alimentaria mundial».

En el acto también participaron el consejero andaluz de Agricultura, Pesca, Agua y Desarrollo Rural, Ramón Fernández Pacheco, y el rector de la Universidad de Córdoba, Manuel Torralbo Rodríguez, como ejemplo de colaboración interinstitucional público-privada.